La comunicación,
herramienta eficaz para el éxito en la vida
Licdo.
Mártires Bastardo C.
La vida en
sociedad nace con el lenguaje, sostienen algunos teóricos. Otros señalan que el
lenguaje nace dada la necesidad que tenía el hombre (y la mujer) de interactuar,
socializar y relacionarse con sus semejantes. Sin la intención de adentrarnos en
asuntos teológicos y religiosos, para muchos el lenguaje o la facultad para
comunicarse a través del habla fue una dádiva del Creador para el hombre. Pero,
independientemente de estas posturas acerca del origen del lenguaje, el papel
imprescindible que desempeña la comunicación en la sociedad actual es
indiscutible. En ese sentido, en los párrafos siguientes, se hace una reflexión
acerca de cuán importante es para cada ser humano desarrollar competencias
comunicativas. Se revisan las teorías de algunos autores que han tratado el
tema de la comunicación y se asume una postura didáctica-teórica sobre la
misma.
Tradicionalmente
se ha considerado la comunicación como un acto de mera transmisión de
información. Siguiendo a Berlson y Steiner, citados en Niño Rojas, (2008) la comunicación consiste en la
transmisión de información, ideas, emociones, habilidades, etc., mediante el
empleo de signos y palabras. De acuerdo a esta definición la comunicación es el
simple acto de comunicar, y da la
idea de un proceso unidireccional, una vía sin retorno, un emisor, quien
comunica y un receptor pasivo. Completan la concepción tradicional los llamados
elementos de la comunicación: junto al emisor y al receptor, el mensaje, el
canal y el código.
Niño Rojas difiere
de esta definición tradicional y señala que comunicarse
es el acto de hacer circular, compartir o intercambiar, por algún medio,
experiencias (conocimientos, opiniones, actitudes, emociones, deseos,
requerimientos, etc.) entre dos a o más personas, con un propósito particular,
y en situaciones reales de la vida humana. (Niño Rojas, 2008). Para Ferrer, citado en Fonseca (2011) la comunicación es la creación de
significados compartidos a través de procesos simbólicos. Es la interacción e
intercambio de ideas con otros.
Dado ese
carácter interactivo, de intercambio y dinámico de la comunicación humana, hay que
referirse apropiadamente a quienes intervienen en dicho proceso.
Calsamiglia y Tusón se refieren a ellos como interlocutores, otros estudiosos
les llaman participantes o actores. Pero sin importar cuál de éstas sea la
designación, es necesario ampliar el enfoque que actualmente se usa para la
enseñanza de la comunicación en los centros de educación de Básica, Media y Superior.
¿De qué le sirve
a una persona conocer teóricamente todo lo relacionado con la comunicación y
sus elementos y no poder relacionarse adecuadamente con sus iguales mediante el
uso de la lengua? Saber comunicarse eficazmente es una necesidad vital para
vivir en sociedad, casi como alimentarse.
El profesor
Bartolo García, en su libro Lengua, pensamiento y educación, plantea que a la
hora de abordar el tema de la comunicación hay que hacerlo partiendo de los
enfoques de la sociolingüística, la pragmática y la lingüística, para luego
ejecutar actividades de construcción de conocimientos. Desde esa perspectiva,
podrá lograrse el desarrollo de las competencias comunicativas de los alumnos y
éstos estarán preparados para el éxito personal y profesional en el ámbito de
la comunicación.
Este autor
destaca que un factor determinante de la comunicación eficaz es la competencia
pragmática. Así, al momento de comunicarnos, debemos tener muy en cuenta todos
los factores relacionados con la persona o personas con quienes vamos a
interactuar. Tener en cuenta el contexto de la comunicación es fundamental para
que se produzca lo que llama “la sintonía entre emisor y receptor”. Y es que,
como afirma Fonseca, la comunicación humana implica: compartir con otras
personas, lograr significados comunes, ejercer una influencia reciproca, vivir
en comunión, tener una interacción continua. Por eso, el contexto en el cual se
desarrolla la comunicación debe ser valorado y tomado muy en cuanta, tanto a la
hora de abordar el tema de la comunicación, como en el momento de interactuar
con otras personas.
En conclusión,
considero, al igual que el profesor García Molina, que el tema de la
comunicación debe enfocarse desde una perspectiva moderna y funcional. En todos
los niveles de estudios se debe poner el énfasis en la función social de la
comunicación y en el desarrollo de las competencias comunicativas de los
alumnos.
Calsamiglia,
Elena y Tusón, Amparo. (2007). “Las Cosas
del Decir, Manual de Análisis del Discurso”. 2da. Edición. Editorial Ariel,
S. A. Barcelona.
García
Molina, B. (2006). Lengua, Pensamiento y Educación.
Teoría Lingüística y Enseñanza de la Lengua. 4ta. Ed. Editorial Surco,
Santo Domingo.
Niño
Rojas, Víctor Miguel (2008), Competencias
en la Comunicación, 2ª. Ed. Bogotá, Ecoe Ediciones